
La historia de Zarza es la de una cachorrita que creció y alguien decidió que no quería tenerla más y Zarza fue abandonada en una perrera con 4 meses, hasta que APAMaG la rescató de allí con 6 meses de edad. Pero eso es pasado, vamos a centrarnos en ella, que es la protagonista.
Zarza actualmente está feliz y adoptada, pero antes de llegar a ese momento tan especial para un perrete abandonado, Zarza pasó por dos casas de acogida donde hubo que corregir algunos problemillas que traía:
- Falta de hábitos higiénicos, problema bastante frecuente para perros que han pasado por una perrera y donde si alguna vez los tuvieron, los pierden.
- Carácter dominante con perros y falta de medida en los juegos, problema derivado de su falta de socialización al estar en la perrera de los 4 a los 6 meses (la perrera cuenta con cheniles individuales, los perros no se relacionan entre sí).
- Ansiedad por separación, lo que le llevó a “fugarse” de su primera casa de acogida saltando la valla de la parcela.
- Carácter territorial y ladrido en la puerta, en su segunda casa de acogida.
DogSchool dio unas pautas muy sencillas para controlar a la loca de Zarza, pautas que se pusieron en marcha tanto en la primera casa de acogida con Eva como en la segunda con Ana, a la que llegó con motivo de las fugas por ansiedad por separación.
Gracias a la rutina de horarios en comidas y salidas a la calle, el orden jerárquico en casa a través de dominancia indirecta y socialización ordenada con perros equilibrados, trabajo en el autocontrol de Zarza y alguna pauta más de refuerzo, Zarza es a día de hoy una perra súper sana y equilibrada que hace muy feliz a su compañera humana.
¡Muchas gracias Celia por adoptarla!